Primeramente, quiero que sepas, que cuando hago fotografía de bodas, busco guardar para siempre tu historia a través de mi estilo, de manera narrativa. Bajo una perspectiva fresca y original, evitando ser el clásico fotógrafo de bodas cliché. Mis protagonistas principales serán ustedes, pero también el amor verdadero que sienten el uno por el otro y aquella magia que predominara en aquel gran día.
Considero que la fotografía de bodas no se trata de poses. Cada momento, muestra de afecto y expresión es lo que realmente importa. Quiero inmortalizar esas miradas de amor sincero, la emoción de tus padres y esas sonrisas insuperables que tendrán al prometerse amor eterno. Puedes posar cuando quieras, pero aquellos sentimientos que te llenaran el alma son los que lograras ver en mis fotografías. Al mismo tiempo, seré una mirada adicional y estaré atento a esos detalles de los que te puedas perder, por no poder estar en varios lugares al mismo tiempo.
Finalmente, lograr inmortalizar el día de tu boda es algo que tiene un valor incalculable. Tus nietos podrán ver con sus propios ojos a través de mis fotografías cómo transcurrió el día de tu boda. Pero sobre todo, para ustedes, será como viajar en el tiempo y revivir cada recuerdo desde el corazón e incluso volver a sentir como el viento rozaba tu rostro.